Toda mi vida esperé conocer al mi hombre ideal, y entonces apareciste tu. No te pareces en nada al hombre que había imaginado. Eres cínico, gruñón e inaguantable, pero lo cierto es que pelearme con contigo es lo mejor que me pasó nunca, y creo que es muy posible que me haya enamorado de tí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario